La cerámica es un reflejo ferviente de lo que las manos del artista significan.
Es el resultado de la consecuencia de una imaginación infinita, del respeto mutuo y de esa conexión especial con cada figura que, me estoy convenciendo, tiene su alma propia.
Mi cerámica es un mensaje, una expresión vida de riesgos, de intentos, de caprichos, de imperfección y autenticidad. Tiene parte de mí.
Mis Fotos
Mi vida como Emprendedora